lunes, 24 de noviembre de 2014

Un Respiro

Darme cuenta
Detenerme
Recapacitar
Corregir el rumbo
Decidir: ¿cantidad o calidad?
Reconocer que estoy agotada











lunes, 17 de noviembre de 2014

Magic Patch

La revista, la compré las navidades pasadas durante un escapada a Alpes. El supermercado es visita obligada en Francia y suelo aprovechar para ojear los revisteros. A pesar de tanta globalización, volvemos siempre con el coche cargado de viandas y revistas varias.


La colcha de la portada fue un flechazo instantáneo y desde entonces, ha estado dando vueltas de la mesa al sofá y del despacho a la cocina. El mes pasado comencé a cortar tiras rojas de lunares. Como técnica, el log cabin, no puede ser más sencilla y relajante.






También le ha llegado su hora a las galletas de Halloween que me regaló Sara. Aprovecho una pausa (estoy decapando unas mesillas) y le arranco de un mordisco la cabeza al pobre muñeco. Olor a madera por la casa y sabor a anís en la boca. Hummm… sólo falta una tacita de té.




lunes, 10 de noviembre de 2014

Donde hay Obras...

Día a día, bloque a bloque, sólo me quedan dos para terminar mi Evening Bloom. 



Me gusta construir. Cualquier cosa. Ver la transformación del material en objeto. En lo personal también valoro lo meditado, lo trabajado con minuciosidad y cariño. Donde hay obras, las palabras sobran.





Después de un glorioso fin de semana en Sanabria, el mal tiempo llega sin avisar. Lola ha vuelto a colonizar el sofá  y se deja arropar con agradecimiento. Le he hecho un cucurucho con la mantita y ronca feliz.


Llueve a raudales. Es tiempo de remolonear disfrutando de estar en casa. Pero me cuesta tanto parar: tres colchas en marcha, cuatro kilos de membrillo en la nevera por hacer, arreglos de ropa, una mudanza en ciernes y se acerca la Navidad…
Me apetece celebrar unas Navidades de película: adornar la casa, preparar menús navideños, regalos bajo el árbol… En fin, toda la parafernalia de la Navidad más comercial. Pero parece que este año mi agenda está más que saturada.






lunes, 3 de noviembre de 2014

Sobres Sorpresa

Me siento tan incómoda abriendo regalos que no suelo celebrar mi cumpleaños. Temo que mi expresión al desenvolverlos, estropee la ilusión del que regala. Sin embargo, cuando llega el cartero o el mensajero con un paquete, me siento como un perro con hueso nuevo. Noooo, no llego a enterrarlo, pero espero hasta tener un rato tranquilo, me revuelco en la alfombra me rasco la oreja (es broma, eh?) y lo abro.

Este mes han llegado dos sobres: uno de Carmen

Por teléfono me dijo que los botones eran para hacerle algo a Lola así que tomo nota aunque no sé que pensará el bicho…


El otro paquete-sorpresa es de Livy {AQUÍ}. Me mandó mail anunciando el envío y la sorpresa fue un ohhh después de otro al ver el contenido: una casita hecha por ella...


Una inspiradora tela vintage, con la que me haré una nueva bolsa para los zapatos de standard. 


Y más botones!!! Estos, como le decía no sé si coserlos en alguna prenda o comérmelos…


Gracias a las dos por la ración de ilusión que contenían vuestros sobres. Me siento afortunada, muy muy afortunada.